mama y bebe

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miércoles, 26 de septiembre de 2012

DÍA 6 - LA 1a. VISITA

Llegó el día esperado, la 1a visita, a las 9.30 visita a la zona de la Clínica Corachán, hasta las 10 no tengo la hora, en un primer momento siento que mi cara hierve, ostras! me he puesto colorada y aún no he entrado, los nervios empiezan a hacer de las suyas en mi estómago, decido ir a tomar un café y leer un poco el periódico hasta la hora indicada y a las 9.55 entro y doy mi nombre, la chica me sonrie y amablemente me indica dónde tengo que ir para que me atienda la doctora que me han asignado, mis nervios siguen haciendo de las suyas, mi obsesión pasa a ser querer pagar la visita y la chica sonriente me repite dos veces que no me preocupe que cuando salga se hace el pago y ya me habrán indicado que hacer y cómo, me dirijo hacia el otro edificio y al bajar las escaleras, noto como me tiemblan las piernas, hay una parte de mi que está pasando un mal rato a pesar del gran deseo de hacer realidad mi embarazo y mi maternidad, si es que no se puede ser tan vergonzosa!, al entrar me atiende otra enfermera sonriente que me fotocopia el DNI y la tarjeta de la mutua, me hace rellenar una ficha con mis datos y qué tipo de maternidad (acompañada o sin), me dicen que espere en la sala hasta que me avise la doctora, a los 5 minutos entro, me pide los datos para hacer el expediente y muy debilmente me hace referencia si voy con pareja, al decir no, no le dió mayor importancia y empezó a darme explicación de la reproducción humana y en mi caso que significa la inseminación artificial con donante (imagen ).

Y que esto se ayuda de medicación para controlar y estimular la ovulación y que ellos van controlando a través de muchas ecografías repartidas por todo el ciclo, aparte de una ecografía el día 2 del ciclo (cosa que aun no me entra mucho en la cabeza con todo el pastel) que sirve para mirar que todo funciona de forma correcta.
El tema de la medicación al enseñar por primera vez la bautizada por mí como "banderilla" me dejó fuera de servicio durante los siguientes minutos, ella hablaba y yo miraba el punzón y la fe con la que me decía lo fácil que era pincharse sola y comodamente, ¿comodamente? ¿sola?, qué diceeeeeeee, pero si yo veo una aguja y me mareo!!!... menos mal que luego te dan la pauta de los pinchazos una vez empiezas el tratamiento.

Cuando volví a ser yo misma y dejé de mirar la aguja que me perseguía, me siguió explicando el porcentaje de embarazo que existe con donante las pruebas que me tenía que hacer, con sorpresa de que por haber estado embarazada anteriormente y haber tenido un aborto espontáneo (recuerdo nada agradable, todo lo contrario para olvidar por siempre jamás), no me tenía que hacer la prueba de la radiografia con contraste de los ovarios o histerosalpingografia (el nombrecito tiene guasa).

Salí con deberes para empezar mi camino paso a pasito, aunque antes de irme, me hicieron una ficha con las características físicas, joooooooo! yo que pensaba que podía pedir al doble de Keanu Reeves o Tarkan!!. Fuera de broma, lo más normal es intentar hacer un clon de la madre con un donante de características de ojos, pelo, complexión parecidas, pero oiga aunque busquen clon que sea más guapo/a guapos/as y más alturaaaaaaaaaa!!!. Al salir finamente me dieron las facturas y me dijeron que cuando quisiera empezar hiciese una llamada y a ello. Los precios de ser mutualista son competitivos ciertamente.

Al volver a casa iba ilusionada y llena de nuevas cosas que llenaban mis horas y que hacían que mi sueño estuviese más cerca. LO CONSEGUIRÉ!

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